what you didn't know about my first year as entrepreneur

I never dreamed of running a small business. I thought that I would work as engineer in an office from 9 to 5. I had worked in a research institute for 5 years. I was comfortable with that setting. I knew the rules. Then, one day, after many trips to Morocco, I realized that I was no longer doing what I loved.

While working for others, I started to write a blog and also opened an online store. I absolutely loved being a secret nomad collecting the most beautiful vintage berber treasures during my trips to Morocco. What started as a hobby that made me happy and felt adventurous turned into an opportunity to become an entrepreneur.

There’s no doubt that running your small business is gratifying. You’ve seen those glamorous photos all-year round of fabulous berber rugs, breathtaking Riads in Morocco and long table dinners with the lovely souls who join this adventure.

This year was pretty sweet. But let’s keep it real. It was also challenging, sobering and sometimes simultaneously exciting and terrifying.

I have been fortunate to discover Morocco a little more, because I’m sure that there’s still a lot to discover. I have enjoyed its hospitality, its particular way of counting time, its delicious tagines shared in family houses and I’ve lost the count of mint tea glasses.

I confess that sometimes the understanding between two different cultures has not been easy, but it has given me lessons of patience and tolerance that I thank today.

This year I forgot about myself. I forgot that when you are more relaxed and in my case in nature, creativity flows and the best ideas come. I quit sport, healthy kitchen and I even felt guilty for having some time for myself. I was in the zone with my work. My health was not very high up on my list. Not moving enough. Not eating dinner until get everything done and the list goes on. Sadly, I’ve found that this is common between small entrepreneurs. We put all our energy and focus on work and forget about anything else, including health.

But in this last month, I’m starting to embrace a healthier life. I took up sport, I’m enjoying again cooking and having some me time. And also if everything goes well, I hopefully indulge myself with a trip to a destination which I have been dreaming for years to scape and reset.

January looks like an opportunity to start over, to bet once more for a dream and to hit the road again. I'm in love with the new berber rugs and vintage textiles that will be part of the new collection and also with the experiences that I'm preparing for you to live Morocco in the most delicious way.

Thanks for being here lovely people. 

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Nunca había soñado con tener un pequeño negocio. Nunca lo podría haber imaginado. Pensé que trabajaría como ingeniera en una oficina de 9 a 5 y es que durante más de 5 años trabajé en un instituto de investigación. Estaba cómoda con esa situación. Era lo que había planeado. Pero después de muchos viajes a Marruecos me di cuenta que no era lo que realmente amaba y me hacía el corazón latir.

Mientras trabajaba, escribía un blog en mi tiempo libre y también abrí una tiendecita online. Me fascinaba poder viajar en mis vacaciones al otro lado del Estrecho y traer conmigo auténticos tesoros bereber. Y así poco a poco, eso que tanto me apasionaba y tantas aventuras me regalaba se fue convirtiendo poco a poco en una oportunidad para emprender mi pequeño negocio.

No hay duda de que vivir de tu pequeño negocio es una de las cosas más gratificantes que existen. Este año ha sido muy dulce. Prueba de ello son todas las fotos que has visto de bellísimas alfombras bereber, de los Riads impresionantes de la medina de Marrakech y de las cenas que he compartido con los que han decidido unirse de alguna manera a este viaje.

Pero para serte sincera, también ha sido un año muy exigente, de mucho aprendizaje y de sentir miedo y emoción a partes iguales.

He tenido la enorme fortuna de descubrir Marruecos un poquito más, porque sé que aún tiene mucho que ofrecerme. He disfrutado de su hospitalidad, de su manera particular de contar el tiempo, de tagines deliciosos en familia y ya he perdido la cuenta de los vasos de té a la menta.

Te confieso que a veces no ha sido fácil el entendimiento entre dos culturas tan diferentes, pero me ha regalado lecciones de paciencia y tolerancia que hoy agradezco.

En este año también me olvidé de mí. Me olvidé de que cuando estás más relajada y en mi caso en la naturaleza, la creatividad fluye y las mejores ideas llegan. Dejé el deporte, la cocina sana y hasta me sentía culpable por tener tiempo para mí. Pero en este último mes, he retomado el deporte, disfruto en la cocina y comienzo a disfrutar de tiempo. Y además si todo va bien, ojala pueda concederme un viaje a un destino con el que llevo años soñando.

Enero promete ser una oportunidad para volver a empezar, para apostar una vez más por un sueño y para emprender de nuevo el camino. Estoy enamorada de las nuevas alfombras y tejidos que formarán parte de la nueva colección y de las experiencias que estoy preparando para que vivas Marruecos de una manera deliciosa.

Nuevas sensaciones me acompañan en estos tiempos de cambio y transformación. Ilusión y vértigo a partes iguales. Y un suave cosquilleo continuo me recuerda constantemente que este es mi lugar  aunque a veces me sienta como una equilibrista en una cuerda floja intentando balancear dos mundos tan opuestos.

Gracias por estar aquí.

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